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Toluca, Edomex; 30 de julio
de 2024.- En el espectro político del Estado de México, de los seis partidos
políticos que tendrán representación en la Legislatura Estatal a partir del mes
de septiembre, resulta que cinco responden a una ideología de izquierda. Sólo
el PAN tendría esa corriente hacia la derecha. Los demás caminarían de forma
muy paralela al gobierno encabezado por Delfina Gómez, con apenas unos matices
en su agenda legislativa. La oposición desdibujada electoralmente y también
como factor ideológico.
Morena, partido al que
pertenece Delfina Gómez, no debe preocuparse por sus aliados del PT y del PVEM.
El Partido del Trabajo siempre ha presumido ser de izquierda. El Partido Verde,
el partido más acomodaticio de la escena electoral y dominado por su
pragmatismo en las urnas, con la bandera ecologista se mueve como veleta a
donde corren los vientos de la conveniencia. De esa forma, el bloque
oficialista está muy definido: Morena-PT-PVEM, tal y como han competido en las
dos más recientes elecciones de la entidad mexiquense.
Luego viene el PRI, que
en fecha reciente y en las reformas a sus documentos básicos, dijo rechazar
todo lo que huela a neoliberalismo. Es decir, la fracción legislativa priísta
deberá moverse hacia el centro izquierda, por lo que tendrá más coincidencias que
diferencias con el gobierno de Delfina Gómez. En el balance, han definido que
la alianza con el PAN resultó un fracaso. Deberán sepultar en el olvido el Pacto
por México y las reformas neoliberales. La agenda legislativa del priísmo
también se correrá en un camino paralelo al oficialismo.
Lo que resta del PRD,
como partido político local, también está identificado con la izquierda. El
surgimiento de Morena desde 2015, ha significado un desastre para los
perredistas que han perdido a sus principales liderazgos; se han extraviado
ideológicamente; se desdibujaron de su presencia electoral. En la mayor crisis
de su historia, han reflexionado que es necesario retomar sus causas de izquierda
política. Aunque jugarán de manera independiente y en solitario, poco resquicio
encontrarán como fracción opositora.
Y por último viene
Movimiento Ciudadano. También con una agenda de izquierda. Basta recordar que
MC fue el primer partido político que postuló a Delfina Gómez a un cargo de
elección, cuando se convirtió en presidenta municipal de Texcoco en el año
2012. Eran años difíciles donde el movimiento lopezobradorista encontró en el
partido naranja un refugio. Los liderazgos más visibles se formaron en partidos
de izquierda. Señalado como el esquirol de Morena, no se advierte un cambio
ideológico ni político hacia el futuro.
De esa forma, únicamente
el PAN quedará como la fracción derechista. Sin embargo, desde septiembre
pasado con el cambio en la gubernatura, la oposición férrea a Morena de sus
liderazgos se ha apaciguado. Los ataques de las campañas electorales se han
mesurado en las posturas legislativas. El neopanismo adolece de la doctrina de
sus fundadores, y eso es notorio. La derecha poco tendrá que aportar en el
Estado de México.
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